VIERNES 6
Blanco Feria del tiempo de Navidad MR, p. 176 (195); Lecc. 1, p. 459
Otros santos: Julián y Basilisa y compañeros mártires; Rafaela María del Sagrado Corazón Porras, virgen fundadora. Beata Rita Amada de Jesús, virgen y fundadora.
¿EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD? 1Jn 5,5-13; Sa/147; Me 1, 7-11
La vida cristiana inevitablemente tiene momentos de oposición y sufrimiento, pero parece que siempre habrá algunos que quieren fingir que es una existencia sólo de triunfo y gloria. El llamado "evangelio de la prosperidad," que presenta la fe como la fuente de I éxito financiero, es únicamente uno de los ejemplos más recientes de tal actitud. Probablemente los cristianos disidentes que se infiltraron en la comunidad de nuestra primera lectura fueron también proponentes de este error. Para ellos, la vida cristiana se caracterizaba únicamente por el agua confortante del bautismo y el entusiasmo del Espíritu. Por eso, el autor tiene que recordarles que su salvador vino "no sólo con agua, sino con agua y sangre" (v. 6), y que sus seguidores sin duda tendrán que derramar su sangre, literalmente o metafóricamente, por el sufrimiento. No existe un evangelio cristiano de la comodidad.
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 111. 4
Una luz se levanta en las tinieblas para los hombres de corazón recto: el Señor clemente, justo y compasivo.
ORACIÓN COLECTA
Te rogamos, Señor, que ilumines bondadosamente a tus fieles e inflames siempre sus corazones con el resplandor de tu gloria, para que constantemente reconozcamos a nuestro Salvador y acojamos la verdad. Él, que vive y reina contigo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El Espíritu, el agua y la sangre.
De la primera carta del apóstol san Juan: 5, 5-13
Queridos hijos: ¿Quién es el que vence al mundo? Sólo el que cree que Jesús es el Hijo de Dios. Jesucristo es el que vino por medio del agua y de la sangre; Él vino, no sólo con agua, sino con agua y con sangre. Y el Espíritu es el que da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. Así pues, los testigos son tres: el Espíritu, el agua y la sangre. Y los tres están de acuerdo.
Si aceptamos el testimonio de los hombres, el testimonio de Dios vale mucho más y ese testimonio es el que Dios ha dado de su Hijo. El que cree en el Hijo de Dios tiene en sí ese testimonio. El que no le cree a Dios, hace de él un mentiroso, porque no cree en el testimonio que Dios ha dado de su Hijo. Y el testimonio es éste: que Dios nos ha dado la vida eterna y esa vida está en su Hijo. Quien tiene al Hijo, tiene la vida; quien no tiene al Hijo, no tiene la vida. A ustedes, los que creen en el nombre del Hijo de Dios, les he escrito estas cosas para que sepan que tienen la vida eterna. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 147,12-13.14-15.19-20.
R/.Bendito sea el Señor.
Glorifica al Señor, Jerusalén, a Dios ríndele honores, Israel. Él refuerza el cerrojo de tus puertas y bendice a tus hijos en tu casa. R/.
Él mantiene la paz en tus fronteras, con su trigo mejor sacia tu hambre. Él envía a la tierra su mensaje y su palabra corre velozmente. R/.
Le muestra a Jacob su pensamiento, sus normas y designios a Israel. No ha hecho nada igual con ningún pueblo, ni le ha confiado a otro sus proyectos. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R/.Aleluya, aleluya.
En el esplendor de la nube se oyó la voz del Padre, que decía: "Este es mi Hijo amado: escúchenlo". R/.
EVANGELIO
Tú eres mi Hijo amado; yo tengo en ti mis complacencias.
Del santo Evangelio según san Marcos: 1, 7-11
En aquel tiempo, Juan predicaba diciendo: "Ya viene detrás de mí uno que es más poderoso que yo, uno ante quien no merezco ni siquiera inclinarme para desatarle la correa de sus sandalias. Yo los he bautizado a ustedes con agua, pero él los bautizará con el Espíritu Santo". Por esos días, vino Jesús desde Nazaret de Galilea y fue bautizado por Juan en el Jordán. Al salir Jesús del agua, vio que los cielos se rasgaban y que el Espíritu, en figura de paloma, descendía sobre él. Se oyó entonces una voz del cielo que decía: "Tú eres mi Hijo amado: yo tengo en ti mis complacencias". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Acepta benignamente, Señor, los dones de tu pueblo, para que recibamos, por este sacramento celestial, aquello mismo que el fervor de nuestra fe nos mueve a proclamar. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio de Navidad o de la Epifanía.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN 1 Jn 4, 9
En esto se manifiesta el amor que Dios nos tiene; en que envió al mundo a su Hijo único, para que vivamos por él.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que nos unes a ti al permitimos participar en tus sacramentos, realiza su poderoso efecto en nuestros corazones, y que la misma recepción de este don tuyo nos haga más dignos de seguido recibiendo. Por Jesucristo, nuestro Señor.