MARTES 30

Blanco Fiesta de santa Rosa de Lima, virgen, Patrona de América Latina (En la República Mexicana) MR, p. 824 (814) / Lecc. II, p. 1114

Otros santos: Beatos Alfredo Ildefonso Shuster, presbítero benedictino, obispo y cardenal; Esteban (Youssef) Nehmé Douaihy, monje de la Orden Libanesa Maronita; María Ráfols, virgen fundadora.

Es la primera santa del Nuevo Mundo. Retirada en el jardín de la casa paterna, vivió el ideal dominicano de la contemplación y la proyección apostólica. Para lograr la salvación de los indigentes se entregaba a tremendas penitencias, que sólo la íntima presencia del Señor la hacía soportar.

AMEMOS A NUESTRAS COMUNIDADES
2 Cor 10,17-11.2; Sal 148; Mt 13.44-46

En un mundo que se presenta cada vez más individualista y egoísta, donde las personas se encuentran cada vez más aisladas, el amor para con nuestras comunidades es algo raro y precioso. En la primera lectura de hoy, somos testigos de tal amor por parte del Apóstol san Pablo. Es cierto que los pocos versos de esta lectura desarrollan una idea que es absolutamente crucial, pero que ya es bastante conocida: Jesús debe ser nuestro orgullo. Sin embargo, su tono emocional comunica algo que podría pasar desapercibido, a saber, un amor entrañable para con la comunidad eclesial en Corinto. Expresiones como "¡Ojalá me toleren!" y palabras como "insensatez" están cargadas de una intimidad cariñosa entre Pablo y los destinatarios de su Carta. ¿Tenemos un amor parecido para nuestras comunidades? ¿Nos preocupamos por sus necesidades? ¿Toleramos sus peculiaridades?

ANTÍFONA DE ENTRADA

Alegrémonos todos en el Señor, en la festividad de santa Rosa de Lima, nuestra patrona y protectora que, en premio a su fidelidad a Dios, mereció hoy entrar al cielo para reinar con Cristo eternamente.

Se dice Gloria.

ORACIÓN COLECTA

Dios nuestro, que concediste a santa Rosa de Lima, encendida en amor por ti, que dejara el mundo y se dedicara únicamente a ti en la austeridad de la penitencia, concédenos, por su intercesión, que, siguiendo en la tierra el camino de la vida verdadera, disfrutemos en el cielo de la plenitud de tu gozo. Por nuestro Señor Jesucristo ...

LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

Los he desposado con un solo marido y los he entregado a Cristo como si fueran ustedes una virgen pura.

De la segunda carta del apóstol san Pablo a los corintios: 10, 17-11, 2

Hermanos: Si alguno quiere enorgullecerse, que se enorgullezca del Señor, porque el hombre digno de aprobación no es aquel que se alaba a sí mismo, sino aquel a quien el Señor alaba. Ojalá soportaran ustedes que les dijera unas cuantas cosas sin sentido.
Sopórtenmelas, pues estoy celoso de ustedes con celos de Dios, ya que los he desposado con un solo marido y los he entregado a Cristo como si fueran ustedes una virgen pura. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

SALMO RESPONSORIAL

Del salmo 148, 1-2. 11-13a.13b-14.
R/. Que alaben al Señor todos sus fieles.

Alaben al Señor en las alturas, alábenlo en el cielo; que alaben al Señor todos sus ángeles, celestiales ejércitos. R/.
Reyes y pueblos todos de la tierra, gobernantes y jueces de este mundo; hombres y mujeres, jóvenes y ancianos, alaben al Señor y denle culto. R/.
Que alaben al Señor todos sus fieles, los hijos de Israel, el pueblo que ha gozado siempre de familiaridad con él. R/.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 15, 9. 5
R/. Aleluya, aleluya.

Permanezcan en mi amor. El que permanece en mí y yo en él, ése da fruto abundante. R/.

EVANGELIO

Va y vende cuanto tiene y compra aquel campo.

Del santo Evangelio según san Mateo: 13, 44-46

En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: "El Reino de los cielos se parece a un tesoro escondido en un campo. El que lo encuentra lo vuelve a esconder, y lleno de alegría, va y vende cuanto tiene y compra aquel campo.
El Reino de los cielos se parece también a un comerciante en perlas finas que, al encontrar una perla muy valiosa, va y vende cuanto tiene y la compra".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Acepta, Señor, los dones que te presentamos al celebrar hoy la fiesta de santa Rosa, virgen, y haz que este memorial de la muerte y resurrección de tu Hijo nos ayude a encontrar en nuestros sufrimientos, aceptados por amor a él y al prójimo, el camino del cielo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio de santas vírgenes y santos religiosos, MR, p. 543 (539).

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Flp 3, 8

Por amor a Cristo, acepté perderlo todo; y todo lo considero como basura con tal de ganar a Cristo.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Tú que nos has hecho partícipes del Cuerpo y de la Sangre de tu Hijo, enciéndenos, Señor, en su amor, para que, a ejemplo de santa Rosa, virgen, seamos capaces de renunciar a cuanto pueda apartarnos de Cristo. El, que vive y reina por los siglos de los siglos.