MARTES 19
Verde / Rojo / Blanco De Feria, Misa por los cristianos perseguidos o Memoria de san Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, presbíteros y compañeros, mártires* o san Pablo de la Cruz, presbítero** MR, p. 1129 (1121) / Lecc. II, p. 919
Otros santos: Beato Jerzy (Jorge) Popieluszko, presbítero y mártir.
EL MISTERIO DE LA SALVACIÓN
Rom 5,12.15.17-19.20-21; Sal 39; Lc 12,35-38
Pablo expone ahora la liberación del pecado y de la muerte en una antítesis comparativa entre Adán y Cristo. Al principio de la carta, el Apóstol ha contemplado a toda la humanidad unida en una especie de maligna solidaridad bajo el imperio del pecado. Ahora da un nombre propio al origen de esa humanidad pecadora: Adán. El otro protagonista de la historia humana es Cristo. Los dos personajes no están en el mismo plano de igualdad, pues el protagonismo del primero está en el delito, en cambio, la muerte queda anulada por la superabundancia del don y del favor de un solo hombre, Jesucristo. Tenemos aquí un texto apretado y difícil, como si Pablo estuviera luchando por comprender; por ello, este pasaje de la carta sigue suscitando tantos esfuerzos a la interpretación. No es fácil asumir el misterio de la salvación.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sal 73, 20. 19. 22. 23
Acuérdate, Señor de tu alianza y no abandones sin remedio la vida de tus pobres. Levántate, señor, defiende tu causa y no olvides los ruegos de aquellos que te imploran.
O bien: Hech 12, 5
Mientras Pedro estaba en la cárcel, la comunidad no cesaba de orar a Dios por él.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que en tu inescrutable providencia quieres asociar a tu Iglesia a la pasión de tu Hijo, concede a tus fieles que son perseguidos a causa de tu nombre, el espíritu de paciencia y caridad, para que sean hallados testigos fieles y veraces de tus promesas. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Si por el delito de un solo hombre reinó la muerte, con cuánta más razón los que reciben la gracia reinarán en la vida por Jesucristo.
De la carta del apóstol san Pablo a los romanos: 5, 12. 15. 17-19. 20-21
Hermanos: Así como por un solo hombre entró el pecado en el mundo y por el pecado entró la muerte, así la muerte llegó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron.
Ahora bien, con el don no sucede como con el delito, porque si por el delito de uno solo murieron todos, ¡cuánto más la gracia de Dios y el don otorgado por la gracia de un solo hombre, Jesucristo, se han desbordado sobre todos!
En efecto, si por el delito de uno solo reinó la muerte, por un solo hombre, ¡con cuánta más razón los que reciben la abundancia de la gracia y el don de la justicia, reinarán en la vida por uno solo, Jesucristo!
Así pues, como el delito de uno solo atrajo sobre todos los hombres la condenación, así también la obra de justicia de uno solo procura para todos los hombres la justificación, que da la vida. En efecto, así como por la desobediencia de un solo hombre, todos fueron constituidos pecadores, así también por la obediencia de uno solo todos serán constituidos justos.
De modo que, donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia, para que así como el pecado tuvo poder para causar la muerte, así también la gracia de Dios, al justificarnos, tenga poder para conducimos a la vida eterna por medio de Jesús, nuestro Señor. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 39, 7-8a. l0.17.
R/. Concédenos, Señor, hacer tu voluntad.
Sacrificios y ofrendas, Señor, tú no quisiste; abriste, en cambio, mis oídos a tu voz. No exigiste holocaustos por la culpa, así que dije: "Aquí estoy". R/.
En tus libros se me ordena hacer tu voluntad; esto es, Señor, lo que deseo: tu ley en medio de mi corazón. R/.
He anunciado tu justicia en la gran asamblea; no he cerrado mis labios, tú lo sabes, Señor. R/.
Que se gocen en ti y que se alegren todos los que te buscan. Cuantos quieren de ti la salvación, repiten sin cesar: "¡Qué grande es Dios!". R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Cfr. Lc 21,36
R/. Aleluya, aleluya.
Velen y oren, para que puedan presentarse sin temor ante el Hijo del hombre. R/.
EVANGELIO
Dichosos aquellos a quienes su señor, al llegar, encuentre en vela.
Del santo Evangelio según san Lucas: 12, 35-38
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Estén listos, con la túnica puesta y las lámparas encendidas. Sean semejantes a los criados que están esperando a que su señor regrese de la boda, para abrirle en cuanto llegue y toque. Dichosos aquellos a quienes su señor, al llegar, encuentre en vela. Yo les aseguro que se recogerá la túnica, los hará sentar a la mesa y él mismo les servirá. Y si llega a medianoche o a la madrugada y los encuentra en vela, dichosos ellos".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, nuestras humildes oraciones y ofrendas, y concede a cuantos padecen persecución de los hombres, por servirte fielmente, que se alegren de estar asociados al sacrificio de tu Hijo Jesucristo y sepan que sus nombres están escritos en el cielo, entre aquellos que están elegidos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 5,11-12
Dichosos serán ustedes cuando los injurien, los persigan y digan cosas falsas de ustedes por causa mía, dice el Señor. Alégrense y salten de contento porque su premio será grande en los cielos.
O bien: Mt 10, 32
A quien me reconozca delante de los hombres, yo también lo reconoceré ante mi Padre, que está en los cielos, dice el Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Por la fuerza de este sacramento, Señor, fortalece en la verdad a tus siervos y concede a aquellos fieles que se hallan en la tribulación que, cargando su cruz detrás de tu Hijo, puedan, en medio de las adversidades, gloriarse sin cesar del nombre de cristianos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
O bien:
*Santos Juan de Brébeuf e Isaac Jogues, presbíteros y compañeros, mártires MR, p. 859 (848)
Del Común de mártires: para varios misioneros mártires, MR, p. 937 (929).
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que quisiste manifestar la esperanza dichosa del reino eterno por la obra y el martirio de los santos Juan de Brébeuf, Isaac Jogues y sus compañeros, concede, bondadoso, que, por su intercesión, la fe de los cristianos se fortalezca cada día más. Por nuestro Señor Jesucristo ...
O bien:
**San Pablo de la Cruz, presbítero MR, p. 860 (849)
Experimentaba un atractivo especial en contemplar la pasión de nuestro Señor y en evangelizar las zonas rurales. Junto con sus compañeros de la Congregación de los Pasionistas, por él fundada, se dedicó a sus anhelos. En 1765 se estableció en Roma cerca de la basílica de los santos mártires Juan y Pablo (1694-1775).
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. 1 Cor 2,2
Nunca me precié de otra cosa, cuando estuve entre ustedes, que de conocer a Jesucristo, y a éste crucificado.
ORACIÓN COLECTA
Que la intercesión de san Pablo de la Cruz, presbítero, quien tuvo un amor excepcional por Cristo crucificado, nos alcance, Señor, tu gracia, para que, estimulados más vivamente por su ejemplo, abracemos con fortaleza nuestra cruz. Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Mira, Dios todopoderoso, las ofrendas que te presentamos en la conmemoración de san Pablo, y concédenos expresar en la vida los misterios de la pasión del Señor, que ahora celebramos. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. 1 Cor 1, 23-24
Nosotros predicamos a Cristo crucificado; a Cristo, fuerza de Dios y sabiduría de Dios.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Señor Dios, que en san Pablo manifestaste de modo admirable el misterio de la cruz, concede, benigno, que, fortalecidos por este sacrificio, permanezcamos fielmente adheridos a Cristo y trabajaremos en la Iglesia por la salvación de todos. Por Jesucristo, nuestro Señor.