DOMINGO 9
Blanco Domingo VI de Pascua MR, p. 381 (382) / Lecc. I p. 223 LH, 2a. Semana del Salterio
Otros santos: Isaías, profeta. Beatas: María Teresa de Jesús Gerhardinger, virgen fundadora; María Carmen Rendiles Martínez, virgen
DIOS QUIERE SER AMIGO
Hech 10, 25-26.34-35.44-48; Sal 97; 1 Jn 4, 7-10; Jn 15, 9-17
En muchas religiones, la relación del ser humano con Dios se expresa en términos de sumisión. Dios manda desde las alturas y la humanidad, desde las llanuras, tiene sólo dos alternativas: someterse o rebelarse. Es comprensible una tal concepción, ya que Dios es infinitamente más grande que cualquiera entidad creada, incluso el ser humano. Quizá por eso, se encuentra esta concepción también en varios párrafos, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento. Lo problemático de esta concepción, es que ignora la relación que Dios quiere establecer, como vemos en el Evangelio de Juan. Allí, Jesús excluye el amor hacia él como el propio de un siervo. Anhela estar cerca, como un amigo amoroso, y no lejos, como un vigilante amenazador. Los seres humanos serán libres, amigos que despliegan su propia iniciativa y comparten su alegría en la tarea común con Dios.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Is 48, 20
Con voz de júbilo, anúncienlo; que se oiga. Que llegue a todos los rincones de la tierra: el Señor ha liberado a su pueblo. Aleluya.
Se dice Gloria.
ORACIÓN COLECTA
Dios todopoderoso, concédenos continuar celebrando con incansable amor estos días de tanta alegría en honor del Señor resucitado, y que los misterios que hemos venido conmemorando se manifiesten siempre en nuestras obras. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
El don del Espíritu Santo se ha derramado también sobre los paganos.
Del libro de los Hechos de los Apóstoles: 10, 25-26. 34 35. 44-48
En aquel tiempo, entró Pedro en la casa del oficial Cornelio, y éste le salió al encuentro y se postró ante él en señal de adoración. Pedro lo levantó y le dijo: "Ponte de pie, pues soy un hombre como tú". Luego añadió: "Ahora caigo en la cuenta de que Dios no hace distinción de personas, sino que acepta al que lo teme y practica la justicia, sea de la nación que fuere".
Todavía estaba hablando Pedro, cuando el Espíritu Santo descendió sobre todos los que estaban escuchando el mensaje. Al oírlos hablar en lenguas desconocidas y proclamar la grandeza de Dios, los creyentes judíos que habían venido con Pedro, se sorprendieron de que el don del Espíritu Santo se hubiera derramado también sobre los paganos.
Entonces Pedro sacó esta conclusión: "¿Quién puede negar el agua del bautismo a los que han recibido el Espíritu Santo lo mismo que nosotros?". Y los mandó bautizar en el nombre de Jesucristo. Luego le rogaron que se quedara con ellos algunos días. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 97, 1. 2-3ab. 3cd-4.
R/. El Señor nos ha mostrado su amor y su lealtad. Aleluya.
Cantemos al Señor un canto nuevo, pues ha hecho maravillas. Su diestra y su santo brazo le han dado la victoria. R/.
El Señor ha dado a conocer su victoria y ha revelado a las naciones su justicia. Una vez más ha demostrado Dios su amor y su lealtad hacia Israel. R/.
La tierra entera ha contemplado la victoria de nuestro Dios. Que todos los pueblos y naciones aclamen con júbilo al Señor. R/.
SEGUNDA LECTURA
Dios es amor.
De la primera carta del apóstol san Juan: 4, 7-10
Queridos hijos: Amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios. El que no ama, no conoce a Dios, porque Dios es amor. El amor que Dios nos tiene se ha manifestado en que envió al mundo a su Hijo unigénito, para que vivamos por él.
El amor consiste en esto: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó primero y nos envió a su Hijo, como víctima de expiación por nuestros pecados. Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 23
R/. Aleluya, aleluya.
El que me ama, cumplirá mi palabra, dice el Señor; y mi Padre lo amará y vendremos a él. R/.
EVANGELIO
Nadie tiene amor más grande a sus amigos, que el que da la vida por ellos.
Del santo Evangelio según san Juan: 15, 9-17
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Como el Padre me ama, así los amo yo. Permanezcan en mi amor. Si cumplen mis mandamientos, permanecen en mi amor; lo mismo que yo cumplo los mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor. Les he dicho esto para que mi alegría esté en ustedes y su alegría. sea plena.
Éste es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. Nadie tiene amor más grande a sus amigos que el que da la vida por ellos. Ustedes son mis amigos, si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su amo; a ustedes los llamo amigos, porque les he dado a conocer todo lo que le he oído a mi Padre.
No son ustedes los que me han elegido, soy yo quien los ha elegido y los ha destinado para que vayan y den fruto y su fruto permanezca, de modo que el Padre les conceda cuanto le pidan en mi nombre. Esto es lo que les mando: que se amen los unos a los otros". Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Se dice Credo.
PLEGARIA UNIVERSAL
Unidos a Cristo, que intercede siempre por nosotros, elevemos, hermanos, nuestras súplicas al Padre:
Para que el que estaba muerto y ahora vive por los siglos de los siglos conceda a la Iglesia ser, con firmeza y valentía, testimonio perseverante de su resurrección, roguemos al Señor.
Para que el resucitado, que dio a los apóstoles su paz, quiera concederla también en abundancia a todos los pueblos, roguemos al Señor.
Para que el vencedor de la muerte transforme los sufrimientos de los enfermos, de los moribundos y de todos los que sufren en aquella alegría que nunca nadie les podrá quitar, roguemos al Señor.
Para que el que tiene las llaves de la muerte y de su reino nos conceda celebrar un día su resurrección con los ángeles y los santos en su reino, roguemos al Señor.
Dios nuestro, que has sido el primero en amarnos, enviándonos a tu Hijo, para que vivamos por medio de él, escucha nuestra oración y haz que, llenos del Espíritu Santo, aprendamos a amarnos los unos a los otros como Cristo nos ha amado. Por Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina, inmortal y glorioso, por los siglos de los siglos.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Suba hasta ti, Señor, nuestra oración, acompañada por estas ofrendas, para que, purificados por tu bondad, nos dispongas para celebrar el sacramento de tu inmenso amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Prefacio I-V de Pascua, MR, pp. 504-508 (500-504).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 14, 15-16
Si me aman, cumplirán mis mandamientos, dice el Señor; y yo rogaré al Padre, y él les dará otro Abogado, que permanecerá con ustedes para siempre. Aleluya.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Dios todopoderoso y eterno, que, por la resurrección de Cristo, nos has hecho renacer a la vida eterna, multiplica en nosotros el efecto de este sacramento pascual, e infunde en nuestros corazones el vigor que comunica este alimento de salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Puede utilizarse la fórmula de bendición solemne, M R, p. 608 (603).
UNA REFLEXIÓN PARA NUESTRO TIEMPO.- Probablemente todo el mundo conoce el famoso dicho atribuido al filósofo y escritor francés, Albert Camus (1913-1960): "No camines detrás de mí, puedo no guiarte. No andes delante de mí, puedo no seguirte. Simplemente camina a mi lado y sé mi amigo". Puede ser que la atribución a Camus sea falsa y que otro sabio haya formulado este adagio. No importa mucho, porque expresa, de una manera llamativa, esa relación entre seres humanos con que sueña Dios. Si Dios quiere ser nuestro amigo, también quiere que seamos amigos entre nosotros. Desea que los seres humanos se traten con igualdad en todos los niveles fundamentales de la vida, con atención a las necesidades que cada uno tiene, con el respeto que merece cualquiera, simplemente por ser humano. Es el mismo sueño propuesto por el Papa Francisco en su encíclica, Fratelli tutti.