VIERNES 18
Morado Feria Mayor de Adviento “O Adonai" * "¡Oh, Señor poderoso! " MR, p. 143 (167) / Lecc. I, p. 403
Otros santos: Malaquías, profeta; Flavio (Flavito), eremita. Beata Nemesia Valle, religiosa del Instituto de las Hermanas de la Caridad.
UN REY JUSTO Y PRUDENTE
Jer 23,5-8; Mt 1,18-24
El profeta Jeremías fue un predicador sorprendente, que lo mismo desmontó las fallidas esperanzas del pueblo en la inviolabilidad de Jerusalén, que sostuvo la esperanza en pleno destierro. Jeremías no era un populista dispuesto a vender ilusiones baratas a personas ingenuas. Si los habitantes de Jerusalén no se convertían, la destrucción llegaría del país del norte. Sin embargo, cumplida la condena, destruido el santuario y deportada la élite gobernante, cumplido el largo destierro en Babilonia, sobrevendría un giro de 180 grados. Dios suscitaría a un nuevo descendiente davídico. Nosotros sabemos que jamás se restableció la monarquía luego de la muerte del último rey. Aparentemente las palabras del profeta de Anatot quedaron frustradas. Los que confesamos a Jesús como Señor e Hijo de Dios sabemos que él es el genuino rey justo y prudente que nos trae la salvación definitiva.
ANTÍFONA DE ENTRADA
Vendrá Cristo, nuestro Rey, el Cordero cuya venida fue anunciada por Juan.
ORACIÓN COLECTA
Concédenos, Dios todopoderoso, que a quienes gemimos oprimidos bajo el peso del antiguo yugo del pecado, nos libere el nuevo nacimiento de tu Unigénito, que estamos esperando. Por nuestro Señor Jesucristo ...
PRIMERA LECTURA
Yo haré surgir un renuevo en el tronco de David.
Del libro del profeta Jeremías: 23, 5-8
"Miren: Viene un tiempo, dice el Señor, en que haré surgir un renuevo en el tronco de David: será un rey justo y prudente y hará que en la tierra se observen la ley y la justicia.
En sus días será puesto a salvo Judá, Israel habitará confiadamente y a él lo llamarán con este nombre: 'El Señor es nuestra justicia'.
Por eso, miren que vienen tiempos, palabra del Señor, en los que no se dirá: 'Bendito sea el Señor, que sacó a los israelitas de Egipto', sino que se dirá: 'Bendito sea el Señor, que sacó a los hijos de Israel del país del norte y de los demás países donde los había dispersado, y los trajo para que habitaran de nuevo su propia tierra' ". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 71, 2, 12-13.18-19.
R/. Ven, Señor, rey de justicia y de paz.
Comunica, Señor, al rey tu juicio, y tu justicia al que es hijo de reyes; así tu siervo saldrá en defensa de tus pobres y regirá a tu pueblo justamente. R/.
Al débil librará del poderoso y ayudará al que se encuentra sin amparo; se apiadará del desvalido y pobre y salvará la vida al desdichado. R/.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, el único que hace grandes cosas. Que su nombre glorioso sea bendito y la tierra se llene de su gloria. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.
Señor nuestro, que guiaste a tu pueblo por el desierto y le diste la ley a Moisés en el Sinaí, ven a redimirnos con tu poder. R/.
EVANGELIO
Jesús nació de María, desposada con José, hijo de David.
Del santo Evangelio según san Mateo: 1, 18-24
Cristo vino al mundo de la siguiente manera: Estando María, su madre, desposada con José, y antes de que vivieran juntos, sucedió que ella, por obra del Espíritu Santo, estaba esperando un hijo. José, su esposo, que era hombre justo, no queriendo ponerla en evidencia, pensó dejarla en secreto.
Mientras pensaba en estas cosas, un ángel del Señor le dijo en sueños: "José, hijo de David, no dudes en recibir en tu casa a María, tu esposa, porque ella ha concebido por obra del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y tú le pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados".
Todo esto sucedió para que se cumpliera lo que había dicho el Señor por boca del profeta Isaías: He aquí que la virgen concebirá y dará a luz un hijo, a quien pondrán el nombre de Emmanuel, que quiere decir Dios-con-nosotros.
Cuando José despertó de aquel sueño, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y recibió a su esposa. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Que el sacrificio que vamos a ofrecer en honor de tu nombre, Señor, nos haga agradables ante ti, para que merezcamos participar de la eternidad de aquel que, con su muerte, trajo remedio a nuestra mortalidad. Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.
Prefacio II o IV de Adviento, MR, pp. 490-492 (486-488).
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 1, 23
Y le pondrán por nombre Emmanuel, que quiere decir: Dios-con-nosotros.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNION
Que recibamos, Señor, tu misericordia, en medio de tu templo y adelantemos así, con dignas alabanzas, las solemnidades ya próximas de nuestra redención.
Por Jesucristo, nuestro Señor.