VIERNES 11

Morado / Blanco Viernes II de Adviento, o memoria de san Dámaso I, papa* MR, p. 133 (157) / Lecc. I, p. 383

Otros santos: Maravillas de Jesús, religiosa de la Orden de las Carmelitas Descalzas. Beato Jerónimo de San Ángelo, presbítero de la Orden de los Siervos de María.

PRETEXTOS Y EXCUSAS
Is 48, 17-19; Mt 11,16-19

Cuando no se quiere acoger un mensaje exigente se termina por descalificar al mensajero. El valor de una declaración no radica en el tono y los gestos del que lo pronuncia, sino en la fuerza de los argumentos que lo sostienen. Muchos de los que ejercemos una vocación como comunicadores, maestros o evangelizadores cojeamos por el lado de la incongruencia. Decimos una cosa y hacemos la contraria. Somos un país nominalmente cristiano que vive como si Dios no existiera, contraviniendo a diario su voluntad salvadora. La generación que escuchó los llamados de Jesús y Juan Bautista no querían cambiar el rumbo de su vida. Con pretextos infantiles querían desautorizar la austeridad del profeta del Jordán y la gustosa familiaridad con la cual acogía el Señor Jesús a pecadores y publicanos. Excusas y pretextos para persistir haciendo el mal.

ANTÍFONA DE ENTRADA

El Señor vendrá con esplendor a visitar a su pueblo, para traerle la paz y la vida eterna.

ORACIÓN COLECTA

Te rogamos, Dios todopoderoso, que concedas a tu pueblo esperar en constante vigilancia la venida de tu Unigénito, para que, conforme a lo que nos enseñó el autor mismo de nuestra salvación, podamos correr presurosos a su encuentro con nuestras lámparas encendidas. Él, que vive y reina contigo ...

LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA

¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos!

Del libro del profeta Isaías: 48, 17-19

Esto dice el Señor, tu redentor, el Dios de Israel: "Yo soy el Señor, tu Dios, el que te instruye en lo que es provechoso, el que te guía por el camino que debes seguir.
¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos! Sería tu paz como un río y tu justicia, como las olas del mar.
Tu descendencia sería como la arena y como granos de arena, los frutos de tus entrañas. Nunca tu nombre hubiera sido borrado ni arrancado de mi presencia". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

SALMO RESPONSORIAL

Del salmo 1, 1-2. 3. 4. 6.
R/. Dichoso el hombre que confía en el Señor.

Dichoso aquel que no se guía por mundanos criterios, que no anda en malos pasos ni se burla del bueno, que ama la ley de Dios y se goza en cumplir sus mandamientos. R/.
Es como un árbol plantado junto al río, que da fruto a su tiempo y nunca se marchita. En todo tendrá éxito. R/.
En cambio los malvados serán como la paja barrida por el viento. Porque el Señor protege el camino del justo y al malo sus caminos acaban por perderlo. R/.

ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
R/. Aleluya, aleluya.

Ya viene el Señor, salgamos a su encuentro; él es el príncipe de la paz. R/.

EVANGELIO

No escuchan ni a Juan ni al Hijo del hombre.

Del santo Evangelio según san Mateo: 11, 16-19

En aquel tiempo, Jesús dijo: "¿Con qué podré comparar a esta gente? Es semejante a los niños que se sientan en las plazas y se vuelven a sus compañeros para gritarles: 'Tocamos la flauta y no han bailado; cantamos canciones tristes y no han llorado'.
Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dijeron: 'Tiene un demonio'. Viene el Hijo del hombre, y dicen: 'Ése es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y gente de mal vivir'. Pero la sabiduría de Dios se justifica a sí misma por sus obras".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Que te sean agradables, Señor, nuestras humildes súplicas y ofrendas, y puesto que no tenemos méritos en qué apoyarnos, nos socorra el poderoso auxilio de tu benevolencia. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Prefacio I o III de Adviento, MR, pp. 489-491 (485-487).

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Flp 3, 20-21

Esperamos como salvador a Jesucristo, el Señor; él transformará nuestro cuerpo frágil en cuerpo glorioso como el suyo.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Saciados por el alimento que nutre nuestro espíritu, te rogamos, Señor, que, por nuestra participación en estos misterios, nos enseñes a valorar sabiamente las cosas de la tierra y a poner nuestro corazón en las del cielo.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

O bien:

* San Dámaso I, papa MR, pp. 895 (885). 941 (933)

Fue Papa de 366 a 384. Es célebre por su fervor en promover el culto a los mártires de Roma. Restauró los antiguos cementerios, consignó en las inscripciones los recuerdos de las grandes persecuciones, con lo cual impulsó definitivamente el culto de esos santos. Además, por petición del Papa Dámaso, san Jerónimo tradujo la Biblia al latín.

ANTÍFONA DE ENTRADA

El Señor lo eligió sumo sacerdote, le abrió sus tesoros y derramó sobre él toda clase de bendiciones.

ORACIÓN COLECTA

Concédenos, Señor, celebrar siempre los méritos de tus mártires a ejemplo del Papa san Dámaso, que tanto los amó y veneró. Por nuestro Señor Jesucristo ...

ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS

Recibe, Señor, este sacrificio que, para tu gloria, tu pueblo ofrece en honor de san Dámaso I, y concédenos alcanzar la eterna salvación. Por Jesucristo, nuestro Señor.

ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Cfr. Jn 10, 11

El buen Pastor da la vida por sus ovejas.

ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN

Señor Dios, los sacramentos que hemos recibido fortalezcan en nosotros el fuego de la caridad que encendió con ímpetu a san Dámaso I y lo llevó a entregarse siempre por tu Iglesia. Por Jesucristo, nuestro Señor.