MIÉRCOLES 1
Verde De Feria, Misa Votiva de San José MR, p. 1205 (1197) / Lecc. II, p. 514 o San Atilano Cruz Alvarado y San Justino Orona Madrigal [Memoria en los lugares donde se conservan sus reliquias] mártires mexicanos*
Otros santos: Aarón de Israel, primer Sumo Sacerdote de los hebreos.
MUCHO RUIDO Y…
Am 5,14-15.21-24; Mt 8, 28-34
Pocas nueces, sentencia el refrán castellano para cuestionar las promesas incumplidas. Aunque no se trate de promesas estrictamente hablando, el profeta Amós denuncia la deshonestidad del israelita que ingresa al templo y dirige a Dios súplicas y alabanzas que no están soportadas en actitudes éticas. Reconocen a Dios como Señor y minutos después disponen de los débiles y las viudas como si fueran algo menos que mascotas. Pisotean a los pobres como si aplastaran cucarachas. Dios está harto de ese teatro del absurdo. Amós lo grita sin rodeos y los terratenientes y sacerdotes se incomodan. Como se incomodan también los habitantes de Gerasa cuando Jesús libera al endemoniado, lastimando sus intereses económicos. El proyecto de Dios termina por incomodar nuestro afán de lucro desmedido.
ANTÍFONA DE ENTRADA Lc 12, 42
Éste es el siervo prudente y fiel, a quien el Señor puso al frente de su familia.
ORACIÓN COLECTA
Dios nuestro, que en tu inefable providencia te dignaste elegir a san José como esposo de la santísima Madre de tu Hijo, concédenos que merezcamos tener como intercesor en el cielo a quien veneramos como protector en la tierra. Por nuestro Señor Jesucristo ...
LITURGIA DE LA PALABRA
PRIMERA LECTURA
Aleja de mí el ruido de tus canciones y que tu justicia fluya como un torrente inagotable.
Del libro del profeta Amós: 5, 14-15.11-24
Esto dice el Señor: "Busquen el bien, no el mal, y vivirán, y así estará con ustedes. como ustedes mismos dicen, el Señor, Dios de los ejércitos. Aborrezcan el mal y amen el bien, implanten la justicia en los tribunales; quizás entonces el Señor, Dios de los ejércitos, tenga piedad de los sobrevivientes de José.
Yo desprecio y detesto las fiestas de ustedes, no me agradan sus solemnidades. Aunque me ofrezcan holocaustos, no aceptaré sus ofrendas ni miraré con agrado sus sacrificios de novillos gordos. Alejen de mí el ruido de sus canciones; no quiero escuchar la música de sus arpas. Que fluya la justicia como el agua y la bondad como un torrente inagotable". Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 49,7.8-9.10-11. 12-13.16bc-17.
R/. Dios salva al que cumple su voluntad.
Israel, pueblo mío, escucha atento; en contra tuya, yo, tu Dios, declaro: R/.
"No voy a reclamarte sacrificios, pues siempre están ante mí tus holocaustos. Pero ya no aceptaré becerros de tu casa ni cabritos de tus rebaños. R/.
Pues todas las fieras de la selva son mías y hay miles de bestias en mis montes. Conozco todos los pájaros del cielo y es mío cuanto se mueve en los campos. R/.
Si yo estuviera hambriento, nunca iría a decírtelo a ti, pues todo es mío. ¿O acaso yo como carne de toros y bebo sangre de cabritos? R/.
¿Por qué citas mis preceptos y hablas a toda hora de mi pacto, tú, que detestas la obediencia y echas en saco roto mis mandatos?". R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Sant 1, 18
R/. Aleluya, aleluya.
Por su propia voluntad el Padre nos engendró mediante la palabra de la verdad, para que fuéramos, en cierto modo, primicias de sus creaturas. R/.
EVANGELIO
¿Acaso has venido hasta aquí para atormentamos antes del tiempo señalado?
Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 28-34
En aquel tiempo, cuando Jesús desembarcó en la otra orilla del lago, en tierra de los gadarenos, dos endemoniados salieron de entre los sepulcros y fueron a su encuentro. Eran tan feroces, que nadie se atrevía a pasar por aquel camino. Los endemoniados le gritaron a Jesús: "¿Qué quieres de nosotros, Hijo de Dios? ¿Acaso has venido hasta aquí para atormentamos antes del tiempo señalado?".
No lejos de ahí había una numerosa piara de cerdos que estaban comiendo. Los demonios le suplicaron a Jesús: "Si vienes a echamos fuera, mándanos entrar en esos cerdos". Él les respondió: "Está bien".
Entonces los demonios salieron de los hombres, se metieron en los cerdos y toda la piara se precipitó en el lago por un despeñadero y los cerdos se ahogaron.
Los que cuidaban los cerdos huyeron hacia la ciudad a dar parte de todos aquellos acontecimientos y de lo sucedido a los endemoniados. Entonces salió toda la gente de la ciudad al encuentro de Jesús, y al verlo, le suplicaron que se fuera de su territorio. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Al prepararnos a ofrecerte, Padre santo, este sacrificio de alabanza, te suplicamos que para cumplir la misión que nos has confiado nos ayude la intercesión de san José, a quien concediste cuidar en la tierra, haciendo las veces de padre de tu Unigénito, El, que vive y reina por los siglos de los siglos.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 25, 21
Alégrate. siervo bueno y fiel. Entra a compartir el gozo de tu Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Renovados con este sacramento que da vida, te rogamos, Señor, que nos concedas vivir para ti en justicia y santidad, a ejemplo y por intercesión de san José, el varón justo y obediente que contribuyó con sus servicios a la realización de tus grandes misterios. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE ENTRADA Cfr. Sab 3, 1-2.3
Las almas de los justos están en las manos de Dios y no los alcanzará ningún tormento. Los insensatos pensaban que los justos habían muerto, pero están en paz.
ORACIÓN COLECTA
Aumenta misericordiosamente en nosotros, Señor, la fe que a tus santos mártires Atilano y Justino los hizo gloriosos porque la mantuvieron intacta hasta derramar por ella su sangre; y concédenos que, profesándola sinceramente, nos justifique. Por nuestro Señor Jesucristo ...
ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Esta ofrenda, que te presentamos al celebrar el triunfo de los santos Atilano y Justino, inflame, Señor, sin cesar nuestros corazones en el fuego de tu amor y nos disponga para alcanzar la recompensa prometida a quienes perseveran. Por Jesucristo, nuestro Señor.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Mt 10. 30. 31
Todos los cabellos de su cabeza están contados; no tengan miedo, porque ustedes valen mucho más que los pájaros del mundo.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Alimentados, Señor, con el Cuerpo y la Sangre preciosos de tu Unigénito, en la conmemoración de tus santos mártires Atilano y Justino, concédenos que, con amor constante, permanezcamos en ti, vivamos de ti y hacia ti nos dirijamos. Por Jesucristo, nuestro Señor.